Starmix | PGU: en qué casos puede suspenderse la Pensión Garantizada Universal para los adultos mayores en Chile
La Pensión Garantizada Universal (PGU) es un pilar fundamental del sistema de apoyo económico para los adultos mayores en Chile. Con un monto de $214.296 mensuales, este beneficio está diseñado para proporcionar un ingreso básico a quienes han alcanzado la edad de 65 años, ya sea que cuenten o no con una pensión. Administrada por el Instituto de Previsión Social (IPS), la PGU es un recurso vital que busca mejorar la calidad de vida de los beneficiarios durante la vejez.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que este beneficio no es incondicional, y existen circunstancias en las que el IPS puede suspender el pago de la PGU. La suspensión se basa en el cumplimiento o incumplimiento de ciertos requisitos establecidos por el organismo. Estas condiciones están diseñadas para garantizar que el beneficio se entregue a quienes realmente lo necesitan y que cumplan con las normativas vigentes.
Una de las principales razones para la suspensión de la PGU es el no cobro del beneficio durante un periodo de seis meses consecutivos. Si un beneficiario deja de retirar su pensión durante este tiempo, el IPS tiene la facultad de detener los pagos, interpretando esta inactividad como una posible señal de que el beneficiario ya no necesita o no puede acceder al beneficio. Esta medida busca asegurar que los fondos públicos se utilicen de manera eficiente y que lleguen a quienes realmente los están utilizando.
Otra causa común de suspensión es la falta de presentación de la documentación requerida para acreditar el cumplimiento de los requisitos de la PGU. El IPS puede solicitar a los beneficiarios que entreguen ciertos documentos para verificar que aún cumplen con las condiciones para recibir la pensión. Si esta documentación no se presenta dentro de los tres meses siguientes a la solicitud, el pago del beneficio se suspende hasta que la situación se regularice.
En caso de que la PGU sea suspendida, existen mecanismos para reactivar el beneficio. Si la suspensión fue debida al no cobro, el beneficiario puede solicitar la reactivación directamente en una oficina del IPS, demostrando su intención de continuar recibiendo el aporte. Por otro lado, si la suspensión se debió a la falta de entrega de documentación, el beneficiario tiene hasta seis meses después de la suspensión para presentar los documentos requeridos y así reanudar los pagos.