Starmix | “Me enteré del incendio cuando estaba en el metro; corrí como nunca para abrazar a mi mamá y decirle que no estaba sola”
El pasado miércoles, la vida de Johan Jeldres y su familia cambió. A eso de las 21 horas, el jugador de Municipal Puente Alto recibió una noticia que lo quebró. Mientras estaba en la estación del Metro Plaza Egaña, haciendo la combinación para seguir su camino hasta Cardenal Caro, a Jeldres le informaron que un incendio estaba consumiendo la casa de su familia.
“Aquí en Conchalí estaban sin luz hace más de una semana y estaban protestando en las esquinas pidiendo ayuda. En eso, llega una vecina a decir que se estaba incendiando una casa y luego de eso la de mi familia y la de otro vecino. No sabemos cuál fue la razón”, comienza diciendo a AS.
Jeldres atiende a nuestro medio desde la cancha del Club Juanita Aguirre de su población, donde este domingo se hizo un campeonato de fútbol para reunir fondos. “Todo lo que se junte se repartirá para la reconstrucción de las casas. Vamos a hacer rifas, bingos, para poder ayudar”.
– ¿Había gente en su casa al momento del incendio?
– Había dos niños. Uno de tres y otro de ocho que estaban durmiendo, y gracias a Dios los pudieron sacar sin ningún daño.
– Usted estaba en el metro cuando se enteró. ¿Cómo manejó la situación?
– Yo venía de entrenar en el club cuando mi mamá avisó por un grupo de la familia que se estaba incendiando la casa. Lloré, sentí rabia, pena, estaba desesperado, el viaje se me hizo eterno. Lo único que quería era llegar. Un caballero se dio cuenta en el metro, a pesar que yo no había dicho nada. Vio mi desesperación y me preguntó qué había pasado. Me acompañó, me tranquilizó y aprovecho de agradecérselo públicamente. Se me hizo eterno el viaje, pero no me dejó solo.
– ¿Qué hizo ni bien llegó a la estación donde vive?
– Cuando salí del metro, miré al cielo y estaba lleno de humo y lo único que hice fue correr sin parar, porque quería ver a mi mamá. Se me apretó el pecho y las piernas, pero no dejé de correr. Lo primero que hice fue abrazar a mi mamá y decirle que la amaba mucho, que no estaba sola. Ella se puso a llorar. Le repetía que íbamos a salir adelante como siempre con toda la familia. Tengo tías y primas que perdieron todo.
– ¿Usted vive en esa casa?
– Mira, yo me fui hace unos meses ahí a Lampa, pero tampoco teníamos luz. Obvio que tenía mi pieza, mis cosas, mi cama, así que me estaba quedando con mi mamá para acompañarla. La vida quiso que pudiéramos estar juntos. A mi polola le tocó vivir ese momento, fue muy difícil para ellas.
– La gente en redes y su club lo han apoyado mucho en las últimas horas. ¿Le sorprendió?
– Sí, la gente se ha acercado a apoyarnos. Tengo muchos amigos, mi mamá es muy conocida, así que la gente nos quiere mucho en la población. Mucha gente llegó a sacar escombros y no saben cómo lo valoramos. Municipal Puente Alto no me dejó solo, hicieron un lienzo que mostraron en el último partido y me emocionó mucho. Le agradezco a todos.
– ¿Dónde han podido dormir en estos días?
– Somos muchos en la familia, así que estamos todos repartidos (ríe). Yo me estaba quedando donde una tía de mi polola cerca de la casa, mi mamá en la casa de una tía, todos acomodándonos como podemos con tal de salir adelante.
– ¿Qué cosas están necesitando de manera urgente?
– Nos ha llegado muchísima ropa, lo cual agradecemos de corazón. Lo que más se está necesitando en este momento es alimentos y materiales de construcción. Si una persona trae un clavo o un tornillo se puede ir avanzando de a poquito. No es necesario traer mucho, porque entre todos se puede lograr.